Molinos

Hoy me besaste, te besé.


Los espirales comenzaron a girar
tornándose verdes, naranjas, morados y rosas,
dejándome entrar en una cueva fresca y acogedora,
donde veo sonrisas sin dueño
donde puedo tomarte para siempre
y no dejarte ir, de donde nunca me iré.


La nada salía de tu boca, una nada fría, una nada física.
Pero de tu caricia a mis labios, salía más que la energía de una enorme cascada,
dejando mucho en mí,
esperanza, ternura, ganas.
Ganas de ti para siempre.

Donde tu rosa es doble

Un beso tuyo.
Contrae mi estómago,
enciende mis labios,
recorre mi boca,
incluso mis dientes despiertan,
mi lengua actúa,
mientras tus manos entibian dulcemente mi cintura,
mis manos sostienen tu rostro.


Me llena de energía, de fuerza,
de alegría, de culpa.


Revive en mí esos sentimientos escondidos o perdidos,
que había sentido antes.


No es correcto, dicen,
pero no importa.
Estoy dispuesta a correr cuantos riesgos sean necesarios,
a vivir el presente, dejar el futuro y consecuencias,
si así me lo pides.


Sé que tu futuro es otro, sé que el mío también
pero esto no es el futuro, no tengo edad del futuro
déjate disfrutar el presente, deja lo obscuro un tiempo
deja tu vida de congeladores enormes.
Te invito a lo tibio,
te invito una manzana,
te permito robar un poco de mí
aprovecha, dobla mi apuesta,
porque un beso tuyo, quisiera que fuera eterno.

Bon's dad

Eres más fuerte de lo que creía
me lo demostraste desde aquel momento
en que todo se nubló para nosotros
aquel día de verano, largo y cansado
donde un ser mayor, en todos los aspectos, nos dejó
me hiciste aceptar lo que sabíamos que tarde o temprano tenía que pasar

Y volvió esa neblina
esta vez más densa en tus ojos que en los míos
traté de ser fuerte, por ti
y decirte lo que te quiero
decirte tantas cosas que pensaba
hacerte saber, por lo menos, que yo estaré ahí cada momento que me necesites
y al final fuiste tú quien demostró todo eso
me calmaste una vez más
porque mi sensación de nauseas
no me permitía hacer nada,
mi cuerpo no respondió,
mucho menos mis labios, no articulaban palabra.

escuché tu voz entre mis sueños
éso sólo significaba una cosa
no era necesario hacer preguntas,
la respuesta era segura y aterradora.

Ese pequeño e inocente ser
nos regaló días de felicidad, preocupación, desesperación, impotencia, sonrisas
días de convivencia, días ocupados, cansados, tranquilos y más
pero nos mantenía unidos
y quiere que sigamos así
debes cuidar a tu familia, la que sigue contigo.

Te necesita, más que nadie, aquella persona con la que decidiste pasar el resto de tu vida
no la dejes caer
no te dejes caer
los planes que tenían, han quedado en el aire,
como muchos otros
pero se pueden aplazar
no siempre se presentará la misma situación
aunque al principio tengan miedo de volver a intentarlo
el miedo es fuerte, pero no más que tú.

Eterna lista, eterno tú.

Sigues viviendo para mí
recuerdo y valoro tus consejos,
los escucho en mis sueños.

Atiendo tu llamada a primera hora, el día de mi cumpleaños
nunca lo olvidas y encuentras la forma de comunicarte conmigo.

 Te veo sentado en ese sillón tan peculiar, te quedas dormido
el humo brota de tus dedos que consumiéndose están.

 Ése, tu sillón representativo:
es peleado por todos,
es recordarte, sentirte, olerte,
estar sentada sobre tus piernas,
como cuando tenía sólo cinco años
escuchando tus historias de terror, tan posibles, tan verdaderas para mi mente inocente.
Sentarme ahí es amarte y verte frente a mí con la sonrisa que tu rostro siempre brindaba,
con el tazón anaranjado en tu mano izquierda,
mientras que la diestra se abre y se cierra para decir "hasta luego";
tus ojos, entrecerrados por tu sonrisa, los imito yo.
No, no los imito, me los regalaste, gracias!

 Nadie quiere mover ese sillón, reparar su tapiz, cambiar el relleno, ni maltratarlo, porque es tu recuerdo, lo que más te representa en nuestra memoria, era tu tesoro, tú eras nuestro y tuviste que irte, el sillón sigue ahí, ahora lo cuidamos por ti.

 Lloro tu recuerdo, lloro tu despedida
pero es poco lo que lloro, tengo más razones para sonreír:
tu beso diario, tu sonrisa eterna, tu envidiable inteligencia, tu esfuerzo admirable e indestructible, tus ganas de vivir, de viajar a pesar del tiempo marcado en tu frente, tus llamadas tempranas, tus bromas frecuentes, tus visitas espontáneas, tus largas caminatas, tus actuaciones bajo la influencia del alcohol y tus duchas profundas de cada martes por la tarde, tantas, tantas cosas.

 Sigues aquí, sigues conmigo, tienes gran parte de mi corazón y te regalo el resto, por tu cumpleaños!
Te amo, abuelo, te extraño como no tienes una idea, por eso sonrío a tu recuerdo, por tu ejemplo de todos los días, nunca te vi de otra manera!

María de la Luz Hernández Campos

Porque sigues con nosotros,
porque podemos verte, abrazarte, escucharte
porque aun puedes vernos, abrazarnos y escucharnos físicamente
porque tienes una descendencia unida en ti
porque nos has soportado, cuidado, alimentado, consentido

Hemos rechazado tus sazones
ignorado tus advertencias en cuanto a nuestras peleas
y unos cuantos, nos alejamos demasiados kilómetros de ti

pero tu amor es incondicional,
tus miradas siguen siendo tiernas cuando ves a tu familia
tus abrazos siguen siendo apretados y cariñosos
tus sazones siguen siendo deliciosas
y tu presencia sigue y seguirá siendo por siempre
uno de los mejores regalos que me han dado.

Te amo abuela! (L)
Quisiera poder reflejar, de manera escrita, la potencia de esta última frase!

No te salves - Mario Benedetti

No te salves
No te quedes inmóvil al borde del camino
no congeles el júbilo
no quieras con desgana
no te salves
ahora ni nunca
no te salves
no te llenes de calma
no reserves del mundo sólo un rincón tranquilo
no dejes caer los párpados pesados como juicios
no te quedes sin labios
no te duermas sin sueño
no te pienses sin sangre
no te juzgues sin tiempo

pero si, pese a todo, no puedes evitarlo
y congelas el júbilo
y quieres con desgana
y te salvas ahora
y te llenas de calma
y reservas del mundo sólo un rincón tranquilo
y dejas caer los párpados pesados como juicios
y te secas sin labios
y te duermes sin sueño
y te piensas sin sangre
y te juzgas sin tiempo
y te quedas inmóvil al borde del camino
y te salvas

entonces, no te quedes conmigo.

Triángulos en mi cabeza

Me gusta sonreir por ti
me gusta la fluidez de los hechos
no forzar nada
esperarte pacientemente
ignorando las criticas,
¿qué importa lo que tenga que tardar?
ignorando los consejos, malos para mi gusto
¿para qué durar tan poco?
sonreir cuando te veo
dar un gran suspiro cuando me das la espalda
para embriagarme de tu olor sin que te des cuenta
ver tu silueta y vestimenta característica a lo lejos
después acercándose, mientras planeo cómo actuar cuando estés cerca
te saludo y te vas y fue un instante
pero es eterno en mi mente.

Paciencia tengo.